¡Ved como se encarnizan los Frany!

¡Ved como se encarnizan los Frany!

Francisco Javier Chaín Revuelta

De la Historia de Medio Oriente nuestros eruditos sólo repiten versiones occidentales erróneas e insulsas. El artículo sobre Líbano de la vieja enciclopedia “Espasa Calpe”, por ejemplo, escribe que el “protectorado” francés e inglés “liberó” a los árabes del Imperio Otomano. El extraordinario “argumento enciclopédico” es que “los pueblos árabes aún eran incapaces de gobernarse a si mismos”. Es decir, los occidentales somos los que enseñaremos a gobernar y organizarse a los pueblos que crearon civilización y religiones modernas. No faltará quien se atreva escribir que los “cruzados” llevaron la religión cristiana a la tierra de Cristo. Lo único que faltaría sería negar lo que occidente ha “protectorado” siempre a Oriente: Colonialismo, división, destrucción, crueldad y muerte.

La ciudad de Antioquia localizada al margen oriental del río Orontes, fue fundada a finales del siglo IV a.c. por Seleuco I Nikátor como capital de su imperio en Siria. Seleuco I había servido como general para Alejandro Magno. Antioquia ocupa un importante lugar en la historia del cristianismo. Fue en esta ciudad donde Pablo predicó su primer sermón cristiano en una sinagoga y donde los seguidores de Jesús fueron llamados cristianos por primera vez (Hechos de los Apóstoles 11,26). Al expandirse el cristianismo, Antioquía fue una de las sedes de los cuatro patriarcados originales, junto con Jerusalén, Alejandría y Roma. Aún faltaban siglos para que nacieran los “cruzados” cuando ya existían cristianos en todos los países árabes.

Laura Fernández-Montesinos Salamanca que investiga Medio Oriente documenta que cronistas árabes de la época de las “cruzadas” no hablan de cruzadas sino de guerras o de invasiones francas. De acuerdo a la región llaman a los francos: farany, faranyat, ifrany, infranyat. Los testimonios citan al soberano Sal-al-Din: "Mirad a los frany!. Ved con qué encarnizamiento se baten por su religión, mientras que nosotros, los musulmanes, no mostramos ningún ardor por hacer la guerra santa.”

Escribe un cronista árabe: “Aquel año empezaron a llegar, una tras otra, informaciones sobre la aparición de tropas de frany, procedentes del mar de Mármara en una multitud innumerable. La gente se asustó. El rey Kiliy Arslan, cuyo territorio era el que más cerca estaba de esos frany, confirmó tales informaciones” Otro nos dice: “Cuando al señor de Antioquía, Yaghi Siyan, le informaron de que se acercaban los frany, temió un movimiento de sedición por parte de los cristianos de la ciudad, por tanto, decidió expulsarlos”

Tras la caída de Jerusalén -cuanta Ibn al-Atir- los frany se han vestido de negro y se han ido allende los mares a pedir ayuda por todas las comarcas, sobre todo en Roma la Grande. Para incitar a la gente a la venganza, llevaban un dibujo que representaba al Mesías, la paz sea con él, ensangrentado y golpeado por un árabe. Decía: ¡Mirad!, ¡Ved al Mesías y ved a Mahoma, profeta de los musulmanes, que lo golpea hasta matarlo! Así son, han sido y serán los “valores” y mentiras en occidente, cúmulos de perversidad. No tarda aparecer ese bendito spot de TV con el Mesías, la paz sea con él, ensangrentado y golpeado por un perredista. Dice: ¡Mirad! ¡Ved al Mesías y ved a López Obrador, profeta por el bien de todos, que lo golpea hasta matarlo! De ese tamaño es la infamia PAN-Fox-IFE-TV en su insano propósito de consumar su ambicionado golpe de estado. fjchain@hotmail.com